10-5-2016 ISLAS VÍRGENES EN EL FRENK
En medio de esta
vorágine de trabajos y capota, nuestros amigos del Frenk, nos invitan a
las Islas Vírgenes Británicas, ochenta
millas al oeste. Participan en un “Boat
Show”, feria náutica del mundo del chárter de alto standing o como decimos los
españoles de lujo, donde demostraran sus aptitudes para ofrecer la calidad mínima
requerida en estos chárters.
Nos parece muy
interesante la idea, y decidimos que también la necesitamos, llevamos más de
tres meses sin fines de semana ni festivos ni nada de nada, un cambio de aires
nos vendrá bien, así que preparamos las “maletas” y desaparecemos siete días.
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CHUBASCO A LA VISTA |
Partimos de la bahía
de Marigot a las seis de la mañana, el viento apenas llega a los 15 nudos, el rumbo
de popa redonda, no ayuda mucho y el capi para no llegar
de noche, asegura el promedio con unas puntitas de motor.
Las ochenta millas transcurren
sin viento, con olas de 2mts y sin problemas, que ya es toda una ventaja.
A las
16:00h estamos entrando por el paso de
Cooper Island, Virgin Gorda nos queda a estribor, Tórtola en la proa y
……………………, un montón de islotes que no
recuerdo el nombre por babor, la verdad un espectáculo. Difícil no imaginar a Sir Drake y sus sangrientos bucaneros llegar con los galeones repletos de tesoros robados.
Una vez dentro del
pequeño "mar virginiano", la navegación se transforma en puro placer, una olita
de medio metro pone colores, mariposas y hasta geranios en los balcones de los
veleros que surcan sus aguas. navegar en el Caribe sin olas es un tema muy
puntual.
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EL PASO DE COOPER |
Conocer las B.V.I.
desde tierra, es conocer nada, es
imposible negar la evidencia, o contratas una embarcación o no viajes a estas islas.
La vida en el
archipiélago está volcada con el mundo del chárter, muy regulado y controlado. La mayoría de
clientela es norteamericana, sus bolsillos creados para escupir dólares, unido
a su costumbre de dar generosas propinas, los hacen favoritos a la hora de ser
elegidos como clientes. Las exigencias requeridas para entrar en el goloso circuito también son complicadas y de
una exagerada cultura yanqui. El negocio es palpable y con muchas posibilidades
económicas, pero las inversiones a
realizar no se quedan atrás.
La entrada al país la hacemos en
Saint Thomas Bay, aduanas e inmigración están en el mismo edificio, en sus
paredes todos son letreros de advertencia y prohibiciones, al estar junto al
muelle de los ferrys, el movimiento de personas es importante.
Con el sello estampado en el pasaporte y la tranquilidad de estar
legalmente nos vamos a ver The Baths.
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THE BATHS DESDE LEJOS |
Desde lejos parece un rompeolas destruido, una cantera mal organizada,
pero una vez pisas roca, te das cuenta de la magnitud de los chinarros, piedras enormes con sus respectivas cuevas,
pasadizos y aguas transparentes, un espectáculo de la naturaleza digno de ver y
sentir.
Obviando
la gran cantidad de gentes que visitan el lugar, pues a veces parecíamos estar
en un gran parque temático, hasta hoy nunca vimos nada parecido, la expresión
de bobo tardo varios días en desaparecer de nuestras caras. Pernoctar aquí está
prohibido, la tarde se echa encima y el próximo fondeo queda lejos, sin acabar
de recorrer este precioso y mágico rincón, nos dirigimos a la isla de Tórtola.
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TRELLIS BAY, !!yo quiero ser artista, mamaaaaaaa!! |
Próxima estación Beef Island y su
guardada Trellis Bay , en su playa
parece haber descarrilado un tren lleno de artistas, no hay tronco de palmera o
árbol que no haya sido tallado por sus manos, el lugar parece concebido por el
mismísimo Dalí.
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?ORIGINAL¿ |
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? COPIA¿ |
Un complejo de cabañas en la misma orilla, hacen de taller,
salas de exposición y muestran lo hippy que se puede llegar a ser. Nos dio la
impresión que el más tonto del lugar
construye hidroaviones con hojas de palmeras para la Royal Navy, por
cierto los precios de las tallas también son para llevar sombrero y bolsillo
“texano”.
Al
día siguiente Gabi nos lleva a Sandy island, un islote donde es imposible no
acordarse de las viñetas de Forges, sus características son las del típico
naufrago debajo de la palmera, sus aguas con el turquesa explotándonos en las
retinas nos dejaron pasmados.
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SANDY ISLAND, EN ESPAÑOL ISLA DE ARENA |
El islote fue donado por Rokefeler a la comunidad
y se preserva como parque natural, dentro, los mosquitos evitan cualquier
intento de conquista, si accedes en
bañador como nosotros hicimos, las ansias de explorador te duran muy poquito,
vamos que acabas corriendo hacia las turquesas aguas, para zambullirte y
olvidarte que tienes piel.
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?1ª LA PALMERA O EL COCO¿ |
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TERMITERO |
El tiempo no da
para más y la feria náutica comienza, hemos de entrar a la marina donde se
celebra el evento y vestir al FrenK .
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UN PLACER |
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PLACER |
La
labor es bien fácil, dejar el barco como si saliera de fábrica, todo debe relucir al nivel de soltar
estrellitas cuando se refleja el sol.
A media mañana
las esponjas, estropajos, cepillos y demás accesorios de limpieza han ocupado
el muelle, como si de una competición se tratase, todo el mundo mira el barco
del vecino, no puede ocurrir que sus aceros brillen más, nosotros para no ser
menos, andamos sumidos en el frote, frote. El Frenk va adquiriendo el lustre
necesario para afrontar la lucha.
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COMIENZA LA BATALLA |
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LOS JUGUETES |
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AQUÍ FALTA ALGO |
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AHORA SI |
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EL ESPLENDOR LLEGO |
El día
se apaga y la noche se deja invitar, las tripulaciones se reúnen y las copas quitan trabas a las lenguas, “
idiomas”, el intercambio de impresiones se va haciendo más fluido y las
tensiones del día salen por los imbornales.
A la mañana siguiente ya no sabemos
si estamos en una feria de chárter o una exposición de juguetes náuticos, sobre
la cubierta de las diferentes embarcaciones, se exhiben toda clase de juguetes náuticos
destinados al ocio de los clientes, pádel surf, snorkel, gusano de arrastre,
propulsor subacuático, wake-board, esquí, diving, canoa, jet ski, tabla de surf
a gasolina, creo que no olvido de nada¡¡.
Son catamaranes de 60 pies de largo
unos cuantos de ancho y también de altos, donde pisarlo te puede costar a partir
de 20.000 dólares semana, el lujo y las comodidades están aseguradas a bordo de
estos hoteles flotantes, solo hay que poder pagarlos.
Pasamos tres días viendo cómo se desarrollan las actividades, los
brokers visitando los barcos, el champan, los canapés, las presentaciones de camarotes, la
gastronomía, todo está calculado hasta
el más mínimo detalle, desde la limpieza hasta el vidrio de las copas, hay que
convencer a los brokers para que estos atraigan clientes, sin ellos el trabajo
no existe.
Para acceder a este
exclusivo circuito, no vamos a decir que hay que hacer un master en hostelería,
pero poco le falta.
Los días que duró la
feria también tuvimos la oportunidad de recorrer la ciudad, los precios en
estas islas también son de lujo, así que tras comprobar que nuestros bolsillos
se quedan pequeños para tanta exquisitez, ponemos las ganas de volver encima de
la mesa.
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ROAD TOWN, MI APELLIDO CON YO |
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?UN JUGO¿ |
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!!POR SI NO SABES PARA DONDE SALIR CORRIENDO!! |
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LO MAS BARATO QUE VIMOS, UN CARRITO |
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EL ANIMAL PREDOMINANTE EN LA ISLA |
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!A VUESTRA SALUD Y PORVENIR! FRENK |
Nuestra necesidad de regresar a
Saint Marten para proseguir los trabajos, hacen que no podamos acabar de
conocer el archipiélago, aquí queda en espera de que un día retomemos su exploración.
Si estáis interesados
en venir al las B.V.I., en el Frenk estarán encantados de recibiros, no os tendréis que arrepentir de nada, solo de teneros que ir de vuelta.
Para contactarlos:
Face: CATAMARAN FRENK
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!!CHAPO!! |
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